El equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Hellín, a través de la Concejalía de Personal, "y en aras a la transparencia", reprendió ayer a los sindicatos con representación en el Consistorio que le acusaban de haber impuesto, de manera unilateral, el calendario laboral para el 2016, al aclarar que éste no lo establecen los sindicatos, sino la propia Administración.

Sin embargo, desde la Concejalía reconocieron que habían sido considerado "conveniente hacer partícipe" a los sindicatos en su confección, a través de varias reuniones, e incluso recordaron que se había accedido a algunas de sus propuestas con respecto a dicho calendario, por lo que tacharon como "desacertadas y no ajustadas a la realidad" esas críticas "que generan un mal ambiente en la negociación y malestar en la plantilla de empleados de éste Ayuntamiento".
Sobre las "acusaciones y falacias de los sindicatos", la Concejalía recordó que el equipo de Gobierno pagó, en la nómina del pasado diciembre, el 26% de la Paga Extra del año 2012 que suprimió el Gobierno de Mariano Rajoy, "aun sin estar por ley obligados a ello", matizaron, y destacaron que se ha procedido a ampliar derechos de descanso al conjunto de los empleados y, en concreto, en el período de vacaciones, en orden a la antigüedad de cada empleado.
En opinión de la Concejalía no se trata de devolver derechos, como reclaman los sindicatos, "sino de intentar restablecer medidas de conciliación familiar a favor de los empleados, siempre y cuando no generen perjuicios a los ciudadanos", y apuntaban que "cuantos más días de descanso tienen los empleados públicos menos servicios se prestan al ciudadano".
Derechos
Para la Concejalía "se pretende confundir a la opinión pública" haciendo creer que se ha denegado un día de fiesta, en alusión a la festividad de Santa Rita, Patrona de los empleados locales, que, este año, coincide en domingo en el calendario, y recordaban que dicha festividad no supone que los ayuntamientos cierren sus puertas.
Para conocimiento de la opinión pública explicaron que los empleados del Ayuntamiento de Hellín, en su conjunto y sin perjuicio de los horarios especiales, prestarán servicios durante el año 2016, menos de 1.650 horas anuales, durante 213 días. En dicho cálculo se tiene en cuenta que tienen derecho a 17 festivos, no coincidentes con sábado ni domingo, seis días de asuntos propios, más otros tres días para asuntos personales sin justificar. Asimismo, tienen derecho a 22 días de vacaciones laborables (que son ampliables en función de la antigüedad de cada trabajador, hasta cuatro días más), hasta sumar un mes de vacaciones.
En resumen, indicaron que el trabajador con menos descansos disfrutará de 48 días libres (sin contar sábados y domingos), en el momento en que retaron a los sindicatos a encontrar un colectivo de la ciudad "que goce de este privilegio", tras matizar que la jornada ordinaria es de siete horas y media al día, teniendo en cuenta que esta media hora es de carácter flexible.
Negociar
Por último, la Concejalía dijo confiar en un cambio en la actual "estrategia sindical" y lanzó una invitación a que "algunos sindicalistas dejen a un lado sus intereses políticos o plataformistas y no se entretengan en demandar trabajar menos jornada incumpliendo la Ley, sino en reclamar un empleo público de más calidad y de mayor reconocimiento", al tiempo les animó a que "aporten ideas en cómo mejorar el servicio que se presta a los ciudadanos".
La Concejalía aseguró que está "dispuesta a seguir negociando en otras materias, bajo los principio de buena fe negociadora y bajo planteamientos de menor conflictividad y más constructivos".