El Pleno del pasado lunes se sumó a la Moción de Izquierda Unida con motivo de la conmemoración el 8 de Marzo del Día Internacional de la Mujer que el concejal y portavoz bautizó "Por nuestros derechos fundamentales: el feminismo, imprescindible", en la que se aluden a una serie de asuntos relacionados con la custodia compartida, violencia machista, discriminación y explotación laboral de las mujeres o la reforma del derecho al aborto.
En este punto Morcillo defendió una ley sobre interrupción voluntaria del embarazo en la que se contemple, como mínimo, la prevención contra los embarazos no deseados con una educación sexual que recorra todos los estadios educativos.
El concejal de IU reivindicó una ley que permita a las mujeres interrumpir su embarazo en la sanidad pública en el momento y por las razones que desee, sin restricciones, sin plazos y sin tutelas y que, igualmente, elimine el aborto voluntario del Código Penal, tanto para las mujeres como para los profesionales sanitarios que lo practican.
Ante la imposición de la custodia compartida IU rechaza la misma, cuando es una medida judicial impuesta sin el acuerdo de ambos progenitores, al advertir que lo único que se consigue es imponer una obligación de continuo contacto y relación entre dos personas, el padre y la madre, que es vivida con rechazo, al menos, por una de ellas, "repercutiendo en muchos casos en un ambiente de crispación y de hostilidad que perjudica al desarrollo personal de los hijos".
Para IU, por lo que a custodia compartida, sólo debería contemplarse en aquellos casos que ambos progenitores estén de acuerdo, y preservando siempre el interés de los menores "que es el bien jurídico a proteger"
No a la violencia
Ante la violencia machista el líder de la Coalición apostó por las políticas municipales de prevención, "donde un pilar fundamental es una educación afectivo-sexual a todos los niveles que facilite desarrollar relaciones basadas en el respeto y la igualdad real entre mujeres y hombres.
Para Morcillo la violencia de género "es una expresión extrema de la desigualdad que se manifiesta de múltiples formas y que recorre la vida de todas las mujeres, en mayor o menor medida. No podemos desterrar la violencia contra las mujeres sin socavar las estructuras discriminatorias que recorren nuestras sociedades" por lo que exigió que, desde el Ayuntamiento, "nos comprometamos a no reducir, sino a reforzar, los recursos económicos y humanos destinados a la implantación de políticas de igualdad activas, integrales y participativas".
Ante la discriminación y explotación laboral de las mujeres exigió "que se asienten las bases de desarrollo de nuestro atacado Estado de Bienestar, generando por parte del Ayuntamiento empleo de calidad y eliminando los obstáculos que imposibilitan el logro de la autonomía personal y económica, de las mujeres".
Morcillo concluyó asegurando que "es imprescindible democratizar nuestra sociedad, desterrando desigualdades y fomentado la participación activa de mujeres y hombres, desde un convencida apuesta por el feminismo como pilar básico de esta transformación".
El concejal no adscrito, Juan Carlos Marín, apoyó la medida, al igual que Ramón Lara, a favor de todo tipo de políticos de prevención y concienciación, tras lamentar que, con la inacción en este sentido del Gobierno del Partido Popular se había retrocedido «de manera preocupante» en la lucha contra la violencia y la igualdad de género y de oportunidades.
Irene Moreno habla de propuesta populista
Irene Moreno, concejala de Mujer e Igualdad, consideró la Moción «demagógica y con marcado tinte político con el fin de sacar un rédito electoral para desgastar y atacar al PP".
La concejal defendió las políticas, que, en materia de Igualdad y en lucha contra la Violencia de Género, se han realizado en lo últimos años, por lo que apostó por la búsqueda de "puntos en común entre todos los partidos políticos, más allá de la crítica por la crítica y el descrédito".