El concejal de Izquierda Unida en el Ayuntamiento de Hellín, Juan Carlos Marín, defendió ayer una sanidad pública, universal, gratuita y de calidad al advertir del desmantelamiento y recortes que se están produciendo en un aspecto «clave e intocable» para el conjunto de la ciudadanía.
Así en la rueda de Prensa que ofreció en las dependencias de la Casa de la Cultura, abrazó los aspectos sanitarios más importantes que IU contempla en el programa electoral de cara a las Elecciones Europeas del próximo domingo, con el fin de mantener la prestación sanitaria, como un derecho "amenazado, sobre todo para las personas en riesgo de exclusión social", ante los recortes que se están produciendo.

Así Marín enumeró los ejes fundamentales que su partido defiende en materia sanitaria basados en un concepto integral de salud, como en los 70, puso a modo de comparación, basado en un sistema universal "en el que no se analiza la salud de las personas como la ausencia de enfermedad, sino como un estado de bienestar físico, psíquico y social".
En este punto indicó que «juega un papel determinante» la atención primaria, en medio de los ataques recibidos, recordó, por ser "altamente resolutiva" ante el nivel de casos que se solucionan antes de pasar al ámbito hospitalario, con el consiguiente ahorro económico, matizó.
Receptores y profesionales, también claves
Del mismo modo aludió a los receptores de la Sanidad, que, en su opinión, deben participar de una forma más visible, por lo que consideró «clave la participación y el control social» de los usuarios en el sistema sanitario, y volvió a reclamar la convocatoria del Consejo Municipal de Sanidad desde donde plantear las necesidades e inquietudes del sector.
Luego también destacó el papel de los profesionales, tras defender una adecuada plantilla y unas justas condiciones para el mejor desarrollo de su trabajo, junto a la necesidad de fomentar su formación continua y un mayor acceso a la investigación ante el retroceso que, en este sentido, se ha producido
También reclamó «la mayor de las sensibilidades» en el área de la Salud Mental, con una atención desde el punto de vista médico y social, y un sector farmacéutico basado en criterios de calidad y eficiencia al margen de los intereses de las empresas.