Algunos de los 250 alumnos que han participado en una nueva edición de la Escuela de Tamborileros se dieron cita, este pasado Lunes Santo, en el Salón de Actos de la Casa de la Cultura, con el fin de asistir a la clausura de un evento que, de la mano de la Asociación de Peñas y el Ayuntamiento, nació hace 31 años.

Por el escenario fueron desfilando algunos de los alumnos que, una hora, durante dos días a la semana, han recibido las clases de sus profesores, con el fin de iniciarse, o perfeccionarse, en los redobles más característicos del tambor.
Así, recogieron su diploma acreditativo tras el redoble de sus tambores, alumnos de los colegios: Capuchinos, Isso, Isabel La Católica, El Rosario, La Olivarera, San Rafael, Martínez Parras, Cañada de Agra, Nava de Campaña y Mingogil. También las clases han llegado, en este caso para los adultos, a la Plaza de Toros.
Desde la cuna
En nombre de la Asociación de Peñas se dieron cita, Joaquín Fernández, que ejerció de maestro de ceremonias del evento, y Raúl García, en ambos casos, “muy contentos” por el desarrollo de la actividad, así como Carmen Rodríguez, la responsable del Gobierno municipal que se dio cita: “es evidente que el tambor en un sentimiento muy especial que, en Hellín, se empieza a sentir desde muy pequeño”, coincidieron todos en destacar.
Una de las novedades han sido las charlas de concienciación que se han impartido en los colegios de El Rosario e Isso, o con el fin de educar a los jóvenes a la hora de tocar el tambor e inculcar el respeto a las procesiones.
Al igual que en eventos anteriores también se reconocieron a varios tamborileros adultos, como José Manuel Moreno, Rosario Contreras y Marisol Soria; a los niños, Lucía García y Alejandro García, así como la empresa, Arthellín, representado por Pascual García.