Carlos Martínez aseguró hace unos días que no descarta volver a presentar su candidatura a la presencia de la Asociación de Cofradías si, dentro del plazo que se inaugurará la próxima semana para la celebración de elecciones, no se presenta ningún candidato, a pesar que reconoció se trata es un cargo en el que se necesita ser "un poco santo, masoquista y tonto".
En una de sus entrevistas más sinceras y sin pelos en la lengua Martínez, en el espacio «Buenos días, Hellín», que presenta Charo López, reveló sus intenciones de dar «un paso al lado» tras ocho años de presidente, en caso de que se presente alguna candidatura de cara al proceso electoral que tendrá lugar a finales de junio o primeros de julio, aunque no descartó afrontar un tercer mandato si no se presentaran candidatos.

Se trataría, por tanto, de un nuevo mandato al frente de un colectivo «muy complicado", en relación a la Asociación de Cofradías, de dirigir «,porque pasan los años y la actitud de algunas hermandades no cambian", al poner como ejemplo que si se planteara, por cuestiones de la liturgia, recomendar a alguna cofradía que no participe en determinar procesión: "se no echarían de encima sin miramientos, pero si lo deciden ellos, está bien hecho", o las quejas que se reciben de algunos vecinos cuando se ha intentado alterar el recorrido de algún desfile,
Sobre un debate que, en ocasiones, aparece acerca de si el presidente de la Asociación debería percibir un sueldo, Carlos Martínez recordó que ya en su día planteó, sin éxito ante el Pleno, la fórmula para que, al menos el tesorero y el secretario, se les pudiera recompensar económicamente, al reconocer el trabajo que desarrollan a lo largo del año en un colectivo «que ha crecido de manera muy importante en los últimos años».
Mucho por mejorar para estar en 1ª
Reconocido seguidor del Real Madrid y haciendo un juego de palabras con el fútbol aplicable a la Semana Santa, indicó que "aunque desde hace tiempo tenemos la declaración internacional de la Semana Santa y, en ocasiones, alardeemos mucho de ello, nos queda mucho por mejorar si queremos estar en 1ª División".
Y es que tras la celebración de la última edición y el informe-valoración que aprobó por abrumadora mayoría el Pleno de la Asociación de Cofradías, Martínez se refirió por ejemplo a uno de los aspectos que más se criticó en casi todos los desfiles procesionales, como el estado de suciedad que presentaban algunas calles de la ciudad.
Sobre las decisiones a adoptar Martínez reconoció que se trata de un problema «muy complicado de resolver en el que se deberían implicar» la Asociación, el Ayuntamiento y la propia concienciación de los ciudadanos, a quienes pidió que, de cara a futuros desfiles, se abstengan de cruzar por en medio de los participantes, al advertir que es una estampa que "afea" mucho las procesiones.
Por si estuviera apurando sus últimos días como presidente Carlos Martínez aseguraba que los momentos más complicados han coincidido cuando se ha visto en la obligación de suspender alguna Procesión en medio de la decepción de los asistentes, sobre todo los más pequeños, indicó, "y más que como presidente, como hellinero, porque me consta lo complicado que es poner una cofradía en la calle".
Contento por haber participado en su día en la tramitación previa a la declaración de la Semana Santa de Hellín como Fiesta de Interés Turístico Internacional, lamentó que aún no se haya podido inaugurar de manera oficial el Museo de Semana Santa, aunque propuso que, en medio de las dificultades económicas que se están viviendo, el edificio de la Casa del Conde puede cobrar vida a lo largo del año, en forma de exposiciones, al recordar que la última sobre imágenes de la Virgen fueron más de 2.000 las personas que se acercaron.
Carlos Martínez consideró también "más que correctas" las relaciones con la Asociación de Peñas en el período que presidió Encarnita Onrubia, ya que quitó hierro e importancia al enfado de ésta cuando no intervino en el acto del Pregón que organizó la Asociación de Cofradías.