La Plaza Nueva va a coger el testigo y el espíritu de los Domingos al Rabal que regresan en una nueva edición, con marcado sabor a San Valentín, dentro de los cambios que se anunciaron en su día por los organizadores, con el fin de fomentar esta serie de calles, y sus comercios, que existen esta zona de la ciudad.

Así, desde primera hora de la mañana, en este enclave se llevarán a cabo actividades de animación para todos los públicos, con el aliciente añado de que, en directo, actuará una tuna compuesta por alumnos de la Facultad de Medicina de la Universidad ce Murcia.
En la Plaza Nueva coincidirán artesanos, castillos hinchables y, a partir de las 13.00 horas, se producirá un Mannequin Challenge (todos los asistentes en ese momento deberán permanecer, unos segundos, completamente quietos) y se grabará en televisión.
Del mismo modo, en la peluquería de Manoli Espinosa coincidirán las obras y cuadros de la pintora, María Catalán; junto a lo que se ha denominado “El árbol de los deseos”, consistente en que el público, ayudado por dos azafatas, podrá colgar una serie de mensajes, con premio para el más ingenioso o creativo.
Ruta guiada
También se ha contemplado, con la mirada puesta en el cielo para que no se cumplan las previsiones meteorológicas, en forma de posible lluvia, ya que han sido más de dos meses de trabajo y de preparativos, una ruta por alunas casas señoriales del Casco Urbano, prevista a partir de las 11.45 horas, desde Burguer Picadero.
Comercios de la zona, como precisamente El Picadero y Dorne, se han encargado de organizar lo que han denominado, “Cada oveja con su pareja”, consistente en el reparto de una serie de dibujos para poder localizar, entre los asistente, a su compañero, con premio para los ganadores, en forma de una tapa en estos establecimientos.
Hay que recordar que, a finales del año pasado, la organización de los Domingos al Rabal, tras un paréntesis en el desarrollo de la actividad, se replanteó una serie de cambios, consistentes en su celebración en determinadas fechas en el calendario, y no todos los meses, así como nuevas ubicaciones: no sólo en El Rabal, sino en la calle El Sol, Soledad o la Plaza Nueva.
De esta manera se reivindica un espacio que, en la década de los 80 del siglo pasado, acogió las representaciones de la ahora consolidada Muestra Popular de Teatro; incluso desde la organización se está reclamando la colaboración ciudadana para poder conseguir una fotografía con una imagen de la venta de agua que tenía lugar en este espacio.