Dentro de la polémica que, desde hace más de dos años, mantienen la Asociación de Cofradías y Hermandades y la Hermandad de la Virgen de La Alegría, cumplió el pasado lunes el penúltimo episodio, cuando el Juzgado anunció que desestima, parcialmente, el recurso de revisión interpuesto contra Auto de fecha 26 de enero de este año.

En estos términos se confirma la resolución recurrida, con la salvedad de que se ordena el levantamiento del embargo de los bienes de la entidad ejecutada, manteniendo la consignación del importe de siete mil euros. Contra la presente resolución no cabe recurso alguno.
Desde la Hermandad de La Alegría, a través de su abogado, Francisco Alarcón, se piensa que este miércoles finalizaba el plazo para que la Asociación acogiera a aquélla como socio del colectivo semanasantero, aunque “dado que este asunto se está escapando de las manos y ha alcanzado unas cotas que no beneficia a nadie, ya no sabemos”.
No más polémicas
Y es que el letrado no llegaba a comprender por qué alargar este proceso, tras tantos fallos judiciales, y “porque la misión de la Asociación de Cofradías es organizar las procesiones, y no puede convertirse en el defensor a ultranza de cómo debe constituirse y los elementos que lo deben integrar, dejando casi sin autonomía al resto de representantes. Alguien tendrá que poner algo de luz a esta situación, de una vez por todas”.
Y es que, consciente que este desgaste es para todos, intuía que la polémica no se va a detener en este punto, “ya que la parte contraria no nos va a facilitar el camino para poder procesionar, ni en esta Semana Santa, y ya veremos el futuro”, aunque advertía que “en caso de demoras no descartamos reclamar una indemnización por daños morales. Y en este escenario, no estamos hablando de 7.000 euros, sino de cantidades más elevadas e importantes”.