El Museo de Semana Santa acoge durante estos días un espectacular belén, gracias la iniciativa de la Hermandad de Santa María Magdalena, que ha materializado un enamorado de esta tradición, como José Luis Soriano.

Fruto de los lazos familiares que le une con la Hermandad, primero se planteó la iniciativa y, posteriormente, hace más de un mes que empezó a diseñar este belén en la planta baja del edificio de la Casa del Conde, compuesto por más de 160 figuras de diferentes tamaños y, en algunos casos, creadas desde el reciclaje de distintos elementos, que, desde los ocho años, empezó a conseguir.
“Agradecido y contento” por esta oportunidad de exhibir la obra ante los muchos hellineros que, sin duda, a lo largo de estas fiestas se van a acercar a contemplarlo en directo (incluso se puede arrojar una moneda, en forma de donativo, a un riachuelo, a cambio de solicitar un deseo), al belén no le falta casi ningún detalle.
Grandes detalles
Y es que, el belén cuenta, no sólo con los elementos y personajes tradicionales, sino con muchos pequeños detalles, en forma de movimiento para aumentar el realismo: como el molino de agua y una serie de cataratas; unos bueyes arando la tierra; un pescador en el río; otro trabajador se representa vareando oliva, y hasta las campanas de una iglesia aparecen en repiqueando.
En la inauguración oficial, tanto el Alcalde de Hellín, Ramón García, como el presidente de la Hermandad, José Bleda, bendijeron esta iniciativa que contribuye a “reivindicar”, en términos generales, “el significado y espíritu de los belenes” y, en particular, “para vivir, de una más intensa y familiar, si cabe”, la Navidad que, al menos en cuanto a la decoración e iluminación especial, ya ha comenzado en Hellín.