Fútbol: Hellín Deportivo, 1; Talavera de la Reina, 1
Alineaciones:
Hellín Deportivo: Diego; Lucas, Ignacio, Eric, Pájaro; Juanan, Rony, Anás, Manu; Casiano y Juanki.
Talavera de la Reina: Machuca; Sergio Hernández, Víctor, Cristian Ortega, Seco; Morato, Pedro Díaz, Encinas, Gilardoni; Mena y Parra (minuto 80, Diego Prado).
Arbitro: Montero de Lerma, de Cuenca, asistido por Martínez Cardo y Torres Castellanos. Regular. Amonestó al hellinero, Lucas; y a los visitantes Morato y Parra.

Goles:
0 - 1. Minuto 53. Parra.
1 - 1. Minuto 81. Seco, en propia puerta.
Incidencias: Partido de la 35ª jornada del Grupo XVIII de la 3ª División disputado en la tarde del Jueves Santo en Santa Ana ante un centenar de espectadores. Mucho calor y césped en aceptables condiciones. Los hellineros botaron cinco saques de esquina (cuatro y uno); los mismos que el Talavera.
 Apelando a aquéllo del más difícil todavía, ya que el Hellín Deportivo tan sólo fue capaz de reunir a once jugadores justos y, en algunos casos, con problemas físicos. Pero aun tan escaso de recursos, donde el conjunto hellinero va más que sobrado es en el coraje compromiso y amor propio por este club, sabedores que, de momento, el dinero brilla por su ausencia y no se sabe a ciencia exacta lo que va a suceder.
Pero los hellineros, apelando a esa sensación especial y espíritu que les acompañó a finales del año pasado, en los meritorios empates, también en medio e tantos problemas, que fue capaz de arrancar ante Socuéllamos y Villarrobledo, en una jornada muy complicada para jugar en Hellín, como Semana Santa, y un Jueves, ni más ni menos, fue capaz de igualar ante un Talavera muy ansioso y al que, tras hacer lo más complicado, que fue abrir la lata de un Hellín muy ordenado, luego, quizás pecó de exceso de conformismo y sufrió un terrible castigo, con el gol, además, en propia puerta de uno de sus centrales.
Pero hasta llegar a la segunda mitad en que sucedieron las cosas realmente decisivas de cara al resultad final el choque, el Hellín sólo pudo presentarse con once jugadores por las ausencias de Gerard, lesionado, y los lesionados Autivo y Jonás, ya que Shola se marchó la pasada semana y Adrián, por cuestiones laborales, no se va a poder reincorporar a corto plazo.
Además Diego, el portero que estuvo sensacional, y Lucas, que jugó de lateral derecho y, como el esto del equipo, a un gran nivel, estaban con problemas físicos. Por las bajas Ignacio tuvo, al igual que sucedió la pasada semana en Albacete tras la expulsión de Gerard, a Erik como acompañante en el eje de la defensa, con Pájaro en el costado izquierdo.
En el centro del campo coincidieron Manu y un Juanky que volvió a recordar al elegante centrocampista murciano antes de que se marchara del equipo para luego regresar; con Anás completando el triple pivote, más Rony y Juanan, en las bandas, y Casiano en ataque, ante un Talavera con jugadores de mucha calidad pero a los que ayer les faltó el acierto.
El Hellín comenzó de manera más o menos prometedora en los primeros minutos. Pero fue un espejismo porque, de inmediato, el cuadro de la Ciudad de la Cerámica tomó el mando de las operaciones y empezó a crear ocasiones muy claras, como en el minuto siete, con la firma de Gilardoni, pero, remató algo forzado en el punto de penalty un buen centro desde la izquierda. Precisamente, otro gran servicio, pero en este caso desde la derecha, lo enganchó el propio delantero, quizás algo arriba en el momento de contactar con el balón, por lo que solo, sin oposición, mandó el balón desviado.
El conjunto hellinero respiró al salir indemne de este acoso, que no derribo, al tiempo que tenía controlar las energías para dosificar el esfuerzo en medio del fuerte calor reinante y la ausencia de cambios en el banquillo. Superado el ecuador se volvieron a desatar las hostilidades ofensivas y a los toledanos les anularon el primero de los dos goles que no subieron al marcador, por fuera de juego de Parra en el momento de cabecear el balón al fondo de las redes, según el criterio del asistente, y que el banquillo de Angel Bernabé protestó de manera airada.
En el minuto 24 Sergio Hernández lanzó con especial violencia desde 25 metros, pero Diego estuvo perfecto de reflejos al adivinar la dirección del balón que envió a la esquina. Fue la última gran oportunidad del Talavera antes de llegar al descanso, lo que aprovechó un Hellín muy ordenado, pero con muchos problemas al llegar a las tres cuartas partes del campo, para dar un susto, ya que Manu-gran partido del albaceteño que claramente ha ido de menos a más-se revolvió dentro del área pero, un defensor envió, in extremis, el balón a la esquina, que se sacó con mucho peligro, ya que se paseó por el área sin que nadie acertara, ni a disparar ni a despejar.
Sin goles y sin cambios comenzó el segundo tiempo en el que el Talavera, en la primera acción, avisó de sus intenciones de ir a por la victoria, pero el disparo de Morato, con toda la intención para hacer daño al portero, muy abajo y pegado al poste, se encontró con la buena estirara de Diego para retrasar lo que luego no pudo evitar, en el minuto ocho, el gol de Parra que definió de maravilla tras ganarle la espalda a la defensa.
El gol le hizo mucho daños a un Hellín, además, muy cansado como para tener que asumir riesgos y la iniciativa del juego, ante un Talavera que, durante unos minutos, bajó la guardia y a punto estuvo Casiano, en el 17, de igualar el partido, pero el disparo del brasileño desde el balcón del área, le salió flojo y muy centrado al lugar en el que se hallaba Machuca.
En el minuto 22 llego la otra jugada polémica con el tanto anulado a Mena al alojar el balón al fondo de las redes, tras el despeje de Diego al lanzamiento de una falta, por fuera de juego, en opinión del asistente, por lo que el partido se sumergió en la recta final en la que al Talavera le entraron esas dudas que siempre surgen cuando se gana de manera ajustada: conformarse con la ventaja, o lanzarse con decisión en busca del segundo gol.
Pero lo que llegó para el Talavera fue un jarro de agua fría, con la indecisión entre el portero y Seco que acabó con el cabezazo del central al fondo de las redes para desesperación de los visitantes, y para algarabía de los hellineros que se fueron con todo arriba, hasta el punto, que una contra conducida por un gran Rony, a punto estuvo de convertir en el gol de la victoria Manu, tras una gran jugada dentro del área pero, finalmente, el balón acabó en la esquina.