Radio Hellín /M. G. El Pleno del Ayuntamiento de Hellín ha aprobado, con el voto en contra de Vox, la moción que se presentó la pasada semana con la que pretenden visualizar y defender los derechos y libertades del colectivo LGTBI.

Ha sido uno de los catorce puntos más intensos del pleno que ha tenido más de dos hora de duración y en el que, al final del mismo, el alcalde ha insistido, como avanzó la pasada semana, que, de cara al futuro, “aun a riesgo de que los partidos políticos me lleven a los juzgados, no se volverán a debatir más mociones de tinte político”, en referencia a las tediosas y maratonianas sesiones que, a lo largo de la historia, se han vivido cuando se han abordado temas nacionales e incluso internacionales.

Carmen Rodríguez, concejala de Mujer e Igualdad, ha defendido una propuesta en la que se apuesta por trabajar, en la nueva realidad que ha traído la pandemia, para construir una sociedad más libre, diversa e igualitaria, creando medidas de apoyo al Colectivo LGTBI+ de Hellín.

Del mismo modo la propuesta contemplar solicitar a la Dirección General de Registros y del Notariado que se suprima el requisito discriminatorio hacia las parejas de mujeres, que deben estar casadas para inscribir a los nacidos, así como reivindicar al Gobierno de España y de Castilla-La Mancha avanzar en los trámites para la aprobación de la Ley LGTBI que recoja las reivindicaciones históricas de todo el colectivo, la Ley Integral de Igualdad de Trato y No Discriminación, la Ley Trans, así como una normativa específica contra los delitos de odio.

En otro punto se insta a las distintas instituciones públicas y privadas a romper con los estereotipos que acompañan a las mujeres bisexuales, lesbianas y transexuales; exigir un impulso a la formación y especialización laboral de las mujeres transexuales para mejorar su empleabilidad y reducir su tasa de desempleo que actualmente supera el 80%, y solicitar la creación de protocolos específicos en los servicios de ginecología y obstetricia para la atención de las mujeres lesbianas, bisexuales y transexuales, así como la implantación de campañas de prevención en materia de salud sexual para mujeres que mantienen relaciones sexuales con otras mujeres.

Vox, en contra

Raquel Tomás, de Vox, ha asegurado que su partido “no está en contra del colectivo, al que respetamos enormemente. Pero nunca apoyaremos ningún acto porque, se trata de una celebración politizada, al servicio de una serie de colectivos de la izquierda o extrema izquierda”.

Para la líder de la formación verde el orgullo gay “no tiene nada que ver con el derecho de los homosexuales, sino de un grupo de lobbys, dedicados a enfrentar a la sociedad y recibir subvenciones”, tras mostrarse “orgullosa de no sumarnos a esta moda por un puñado de votos”.

Tomás ha asegurado que el colectivo “no representa el sentir de todos los homosexuales. Ni siquiera de una mayoría”, tras reivindicar el derecho a celebrar esta jornada, “pero con sus propios dineros. No con fondos públicos”.

Los partidos, perplejos

Mario Artesero, de Ciudadanos, ha acusado a Vox de ser el partido “que siempre busca polemizar” en torno a este tema, tras arropar las reivindicaciones del colectivo ante una serie de personas que “viven en una mentalidad social arcaica”.

Manuel Serena, portavoz del PP, ha vuelto a lamentar que, por encima de la aprobación de esta propuesta, ha vuelto a prevalecer la polémica entre los distintos partidos políticos. Tras reclamar a Vox que, en el futuro, presente alternativas a sus discrepancias, ha avisado que los mensajes de la formación verde “ya me aburren”.

Tras abandonar el salón María Jesús López, concejala de la Agrupación de Electores, y no participar ni del debate ni de la votación, el alcalde ha apostado por la prudencia a la hora de hablar de Vox, pero le ha pedido a la concejala que se abstenga de dar lecciones, sobre todo, en cuanto a las víctimas de terrorismo.