El alcalde de Hellín, Manuel Mínguez, y el concejal de Urbanismo y Obras y Servicios, Juan Antonio Moreno Moya, confirmaron ayer la remodelación integral que, a través del Plan Obras y Servicios (POS) del 2015, se va a realizar en la calle Peña Caída, enclavada en el Casco Antiguo. En total se van a invertir 160.000 euros en mejorar el alcantarillado, agua potable y pavimentación, a partes iguales en Ayuntamiento y Diputación Provincial.
En las dependencias del Ayuntamiento, Moreno Moya justificó la actuación en esta calle haciéndose acompañar de una serie de fotografías con las que quiso demostrar el estado de deterioro en el que se halla, tras lamentar que no se haya actuado desde hace años.
Así puso el ejemplo que ,en lugar de una red de agua potable colectiva, existen acometidas a nivel individual de cada uno de los vecinos, «por lo que, al igual que con otra serie de actuaciones que hemos realizado el objetivo es hacer lo más habitable, accesible y atractivo posible nuestro asco Antiguo, tanto en las obras que se ven como en las que pueden pasar desapercibidas para los ojo de los ciudadanos, pero necesarias», indicó.
El concejal popular también dibujó otra serie de problemas en el alcantarillado ante lo que describió como la falta de cota de algunas casas, es decir, inferiores a la de la propia calle, tras relatar igualmente que la sección del tubo es muy pequeña. En este punto Moreno relató que, cuando se actuó en la calle Canalón, de alguna manera se allanó el camino para ejecutar esta operación,
El proyecto técnico lo realizará el Ayuntamiento de Hellín mientas que se solicitará a la Diputación que sea el propio Consistorio quien la licite y adjudique, aunque no pudo concretar el período de ejecución en el que también se colocará una nueva iluminación con esa luz cálida que ya luce en otros puntos de la ciudad.
Más acciones en el Casco Antiguo
Esta serie de obras son una continuación a las que, como enumeró el alcalde, se han ejecutado en esta mandato corporativo, en calles como Canalón, Barranco del Judío, Cristo, San Simón, San Juan, Cantarería y Antonio Mateos, en las que se mejoró la red de agua potable, alcantarillado y se colocó hormigón impreso.
En total se invirtieron unos 500.000 euros con cargo a la Diputación de Albacete, aunque con presupuesto del propio Ayuntamiento también en este tiempo se acometieron actuaciones en El Rabal, el Barrio del Castillo y Salvador.
De cara al futuro el propio Juan Antonio Moreno apuntaba las intenciones del Gobierno de, al menos, actuar en dos calles por año, por lo que dentro del Casco Antiguo señaló como «prioritarias» Olvido, Gracia y Algarra, aunque también reconoció carencias y deterioros en dos zonas muy transitadas, como De Eras, donde se halla el Colegio Compañía de María, o Cristóbal Lozano.