El Salón de Plenos vivió una jornada histórica o, cuanto menos, poco habitual, ya que los representantes de los tres partidos políticos comparecieron ante los medios de comunicación de manera conjunta, para exhibir el acuerdo que ayer materializó el último Pleno del año, acerca de la decisión de reconvertir el proyecto original del Palacio de Deportes en un teatro-auditorio y una nueva biblioteca, entre otros servicios.

Ese fue uno de los cinco puntos que se recogían en la última sesión extraordinaria del 2014, de apenas una hora de duración, y que respaldaron los partidos de la oposición y del Gobierno municipal del PP, pero no así el concejal no adscrito, Juan Carlos Marín, quien consideró que con el documento aprobado se está actuando "de manera precipitada y sin un estudio previo técnico más conciso y concreto de lo que se pretende", tras reconocer la necesidad de las infraestructuras culturales que se replantean "pero creo que vamos muy deprisa y comprometiendo la gestión de futuras corporaciones".
Las intervenciones del Pleno fueron una continuidad de lo que, minutos antes, los partidos políticos declararon en rueda de Prensa, y en la que tanto el alcalde, Manuel Mínguez, como el concejal de Urbanismo, Juan Antonio Moreno, el concejal del PSOE, Ramón García, y Javier Morcillo, por Izquierda Unida, coincidieron en destacar que se trataba de una "necesidad urgente".
Manuel Mínguez habló de día histórico y de regalo por anticipado de los Reyes Magos, al admitir que "eran un clamor popular" estas nuevas infraestructuras" al lamentar que Hellín es la única ciudad de más de 20.000 habitantes de la Provincia que no cuenta con una instalación de estas características.
Necesidad imperiosa
En la misma dirección se expresaron Ramón García, quien consideró «acertada y necesaria» esta decisión, así como Javier Morcillo, concejal de IU, tras recordar que ésta es una petición, «aunque algo tardía", que la Coalición contempló en el programa electoral con el que se presentaron a las elecciones municipales del 2011.
El concejal de Urbanismo, Juan Antonio Moreno, tras saludar con satisfacción el entendimiento, explicó que el acuerdo de mínimos que se reclamará a la Junta de Comunidades, es la construcción de un teatro-auditorio, con una capacidad mínima de 600 personas, y una nueva biblioteca, aunque el resto de hipotéticas dependencias que se diseñaran dependerían del presupuesto.
En este sentido se recordó que la inversión prevista en su día ascendió a ocho millones, de los que se ejecutaron en el sector de Tenerías un 30 por ciento, por lo que el acuerdo alcanzado conlleva la petición a la Junta para que financie el resto de la obra, mientras que el Ayuntamiento se compromete a dotar los fondos económicos necesarios para transformar el proyecto técnico que sirva de base a la construcción del inmueble.
De esta manera Juan Antonio Moreno recordó que la reconversión del proyecto «es perfectamente realizable», aunque aclaró que será necesario un cambio en la actual techumbre, más elevada en el futuro, con el fin de adaptarla a las necesidades de la caja escénica que tendrá que el referido teatro.
Así el acuerdo plenario de ayer se enviará a la Junta, a la que invitarán a que el proyecto se relance cuanto antes, con el deseo de que se pueda inaugurar a lo largo del 2017: "lo importante es que éste es un proyecto sin ideologías y color político", como respuesta a las declaraciones que en la sesión realizó el concejal no adscrito.
Apoyo a la Casa de la Cultura
Ramón García, que en el Pleno defendió de alguna manera el objetivo con el que se diseñó el Palacio en el 2009, prefirió no entrar a valorar las causas en estos tres años de las obras, pero reclamó a la Corporación que resulte elegida tras las elecciones de mayo del 2015, que no se abandone la Casa de la Cultura que, actualmente, acoge, entre otros servicios, a la Biblioteca, Radio Hellín, la extensión de la UNED, la Escuela de Música y cursos de la Universidad Popular.
Tanto el alcalde como el concejal de Urbanismo se mostraron a favor de «mantener, incluso potenciar» el emblemático edificio de las Plazas de las Monjas, conscientes que se trata de un «lugar clave para la revitalización» del Casco Antiguo.