Los Bomberos del SEPEI tuvieron que acudir a primera hora de la mañana la Autovía A-30, en las inmediaciones de Pozo Cañada, donde se produjo el vuelco de un camión de gran tonelaje que trasportaba, con dirección a Murcia, 20.000 litros de mosto, ya que a consecuencia del accidente ardió de manera espectacular la cabeza del vehículo.
La llamada se produjo sobre las 07.30 horas cuando, en principio, se avisó sobre el accidente de un camión-cisterna, por lo que el Parque de Bomberos activó el protocolo de actuación en materias peligrosas, aunque, cuando 20 minutos después el camión cisterna con cinco bomberos y el vehículo de mando llegó al lugar del accidente, se comprobó que se trataba de una falsa alarma, por lo que se procedió a sofocar las llamas, ya que el conductor, un vecino de mediana edad de Tomelloso, había ya logrado salir, ileso, de la cabeza del camión que ardió en llamas.

A causa del accidente, que se pudo producir ante el reventón de una de las ruedas, obligo al corte del tráfico rodado hasta que sobre las 10.00 horas se recuperó la normalidad.