El alcalde de Hellín, Ramón García, dejó entrever esta semana que, en la próxima edición de Navilandia, podrían producirse cambios importantes, en cuanto a la ubicación tradicional de esta actividad de los últimos años, en el Pabellón Adolfo Suárez, acompañados de novedosas actividades “porque queremos, desde la imaginación, dar un nuevo sentido y espacio”.

El primer edil lanzó esta noticia en la inauguración oficial, el pasado martes, de esta actividad que, hasta el 4 de enero de 2017, reunirá a miles de personas-pequeños y mayores-en torno a los castillos hinchables, videojuegos, recreativos o talleres navideños que se van a impartir por monitores, todos los días, a partir de las 17.30 horas, excepto los 31 de diciembre y 1 de enero, en que las instalaciones permanecerán cerradas.
Rodeado de algunos compañeros de su Gobierno, como la responsable de Festejos, Fabiola Jiménez, el alcalde celebró “una buena idea en Navidad para disfrutar en familia”, antes del recorrido por cada una de las atracciones, pero reconoció públicamente que, “tras varios años en que esta actividad se ha terminado de consolidar, creemos que ha llegado el momento de un giro, en positivo”.
No quiso avanzar más detalles, pero, el alcalde socialista hellinero se estaba refiriendo a lo que se valoró de alguna manera en la víspera de esta edición, es decir, una nueva ubicación por determinar (podría ser la Plaza de la Iglesia u otro espacio al aire libre).
Implicación e ilusión
La concejala de Festejos también quiso destacar en su intervención la celebración de Navilandia “para poder disfrutar todos los hellineros de una Navidad diferente y en familia. Es época de sentir esta sensación: y desde el Gobierno nos hemos implicado en su programación”, tras agradecer, al igual que el alcalde, “el esfuerzo e implicación” de las personas que estarán al frente de las diferentes atracciones.