Radio Hellín /M. G. Sin lugar a dudas una de los grandes protagonistas de la Cuaresma está siendo la Banda de Cornetas y Tambores Juventud Musical de Hellín, en plena celebración de su 50º aniversario y que, estos días, expone una serie de elementos y recuerdos que ilustran el devenir de su magnífica trayectoria.

En la sala polivalente del Museo de Semana Santa se dieron cita el alcalde de Hellín, Ramón García, el concejal de Semana Santa; y en representación de la banda, Conrado Sánchez y Álvaro Ibáñez, en presencia de numerosos admiradores de estas formaciones musicales, como se puso de manifiesto en el concierto conmemorativo que, hace unas semanas, ofrecieron en el abarrotado Teatro Victoria, con el estreno de la marcha “Legatum”, de Adrián Sánchez.
Además con motivo del aniversario se ha diseñado un logotipo y un cartel, obra de Juanfran Torres, donde se ponen en valor las galas de los cornetas que se van a estrenar esta Semana Santa.
Recorrido nostálgico
En el recorrido se podrán ver todo tipo de elementos, desde trajes, estandartes, banderines, fotografías, instrumentos de la época o algunos premios recibidos a lo largo de este período.
El Alcalde destacó la trayectoria de la banda, que, como el resto de formaciones musicales, consideró “fundamentales” en el contexto de la celebración de la Semana Santa, aunque reconoció sus preferencias por las marchas que se interpretaban en el pasado, ya que los nuevos estilos han absorbido prácticamente todas las bandas de la ciudad, al más puro estilo sevillano.
Conrado Sánchez señalo que esta exposición y el resto de actos que se van a lleva a cabo “encajan con el espíritu sencillo y humilde de una banda que no busca ni excentricidades ni acciones por encima de nuestras posibilidades”.
Fue en San José, en 1973, cuando la banda nació de la mano de Juan Losada, aunque su consolidación comenzó al comienzo de la década de los 90: “desde entonces un logro y una ilusión sustentada por distintas generaciones de músicos, familiares, amigos y todas las personas que han apoyado y creído en este proyecto”, reconoció Álvaro Ibáñez, quien reivindicó los muchos ensayos y desvelos hasta haberse convertido en una banda de referencia, más allá de la provincia, como se ha puesto de manifiesto en los numerosos conciertos y actuaciones que han protagonizado.
Aunque el estilo inicial fue militar, a partir del 2001 se inclinaron por otro tipo de sonidos andaluces, principalmente, dentro también de la evolución instrumental que la banda ha ido experimentando en estas décadas.