El Museo de Semana Snata amplió sus actuales contenidos que se inauguraron el año pasado, con la implantación de nuevos objetos y elementos que ayudarán a comprender a los hellineros y, sobre todo a los visitantes estos días y en el futuro, el desarrollo de la Semana Pasional hellinera, en su doble vertiente de procesiones y tamboradas.

Así, el alcalde de Hellín, Ramón García, fue el encargado de abrir las puertas a los nuevos contenidos del Museo, junto al concejal del Gobierno, Emilio José Pinar, que ejerció de guía de todos los asistentes para explicar los pormenores, en forma de mejoras, que se han producido, en relación a la primera fase que se inauguró en la Cuaresma del 2018.
Así, una de las novedades es la recreación de un tambor gigante, decorado con los colores, azul y blanco de Hellín, en cuyo habitáculo interior, con una capacidad de 20 personas, se ha previsto la proyección de un video con algunas de las imágenes más representativas de la Semana Snata.
Posteriormente el recorrido se detiene en el la imagen que acompaña al Vía Crucis de Las Antorchas y el de Lunes Santo que se volverá recrear en unas horas por algunas de las calles más emblemáticas del Casco Antiguo, junto a la presencia, en la sala principal, de un manto de La Dolorosa, fechado en el comienzo del siglo XX y de la Procesión del Martes Santo y el Cristo de la Preciosísima Sangre
Más adelante aparecen otros elementos asociados a la Tamborada, como tambores de otras épocas; así como la túnica, peluca y corona del Cristo de Medinaceli y el tradicional “carrico” de San Juan, o la maqueta original del Ecce Homo, de José Zamorano, y de Las Angustias.
En el recorrido también aparecen imágenes, como la Virgen del Perdón, San Pedro y La Sentencia, a la espera de reubicar El Prendimiento, El Resucitado con la duda de si también estará la Oración del Huerto, junto a La Burrica, preparada para procesionar este Domingo de Ramos, sin descartar que las imágenes también de culto, en momentos puntuales, también se podrían unir.
Domingo de Resurrección
Aparecen báculos y túnicas de las cofradías y hermandades que procesionan en la noche de Viernes Santo; así como una réplica de la piñata que se abre en El Encuentro, durante Domingo de Resurrección y algunos elementos de bandas de cornetas y tambores que participan en el desfile final.
En la parte final se han concentrado los tres primeros carteles que se editaron de la Asociación de Cofradías y de Peñas, y una sala de audisoviuales, mientras que existen otros huecos, de momento vacíos, que, en el futuro, van a ocupar el trono de la Virgen el Dolor, así como de La Soledad.
Además, se ha reservado un espacio para contemplar túnicas, zapatillas y otros elementos, de San Pedro o La Dolorosa que ilustran las procesiones de antes de la Guerra Civil.
Tanto Pinar, como el alcalde de Hellín, casi como Javier Morcillo, concejal de Turismos; como víctor García, de la Asociación de Cofradías, Joaquín Fernández, de la Asociación de Peñas, se mostraron muy "contentos e ilusionados" con este nuevo avance en el Museo, con un recuerdo muy especial al ex presidente del colectivo semanasantero ya fallecido, Francisco Juárez, como persona que creyó, e impulsó, de manera importante, el referido MUSS.
De cara a futuro la idea es que el Museo es poder estar abierto durante el mayor número de días y horas posibles, mientras que se estudiará, de la mano de los servicios jurídicos y Secretaría, la posibilidad de poder establecer un precio simbólico, en forma de entrada, si acaso para cubrir gastos derivados del funcionamiento del MUSS, como luz, agua y otros aspectos del mantenimiento.